Levantarse con vistas a las murallas y las cúpulas de la Ciudad Vieja de Jerusalén es un lujo del cual pueden presumir los clientes del Hotel Rey David de Jerusalén. Este alojamiento, ahora propiedad de la cadena Dan Hotels, es uno de los más significativos no solo del país mediterráneo, también del mundo. El sello The Leading Hotels y sus 5* acreditan sus estándares excelsos de calidad.
El alojamiento se sitúa a 15 minutos a pie del centro de Jerusalén y a 12 minutos de la Puerta de Jaffa en Ciudad Vieja. Dispone de 233 habitaciones de gran lujo, entre las cuales se encuentra la suite presidencial, la Royal suite y la Jerusalem suite. Ha tenido un rol clave en la historia judía de la ciudad, en la Guerra de la Independencia y en la reunificación. Esta es la cara más conocida del majestuoso hotel, pero más de 90 años de historia dan pie a otra ‘cara’ repleta de curiosidades menos conocidas:
La influencia de llamarse David
Apodarse como el más famoso rey de Israel es un hecho que se nota en cada rincón interior del hotel. El interiorista suizo Hoffschmid recibió el encargo de crear, a partir de la decoración, un ambiente que evocara al período de David. Lo consiguió con techos altos en las zonas comunes, una paleta de colores inspirada en los antiguos palacios de Nínive y Babilonia y unos grabados bíblicos en las paredes que, a día de hoy, todavía se conservan.
Un hotel ‘reservado’ a las altas esferas
248 primeros ministros, 102 presidentes, 53 reyes y 24 ganadores de los Premios Óscar. Estas son las estadísticas que ostenta el alojamiento israelí en relación a la cantidad de personas ‘VIP’ que ha hospedado. Algunos de los nombres más célebres son: el Príncipe Carlos de Gales, Barack Obama, Tony Blair, Michael Douglas o Madonna.
Algunas figuras de la monarquía española también forman parte de esta selecta lista. El Hotel Rey David alojó a Alfonso XIII en 1931, poco tiempo después de su exilio. El establecimiento también ha hospedado en más de una ocasión a Felipe VI, tanto en calidad de príncipe como de rey.
Una costumbre británica en el corazón de Jerusalén
Cada día, con excepción del Shabbat, el Hotel Rey David organiza la High Tea o la denominada hora del té, todo un símbolo de la cotidianidad inglesa. De las 16 a 18 horas de la tarde, toda persona que haya hecho una reserva puede disfrutar de una variedad de mini sándwiches, bollería, pasteles y tés. Indudablemente, también se incluyen dulces típicos de la ciudad israelí. Este nuevo servicio es una influencia del nuevo director general, el empresario hotelero Tamir Kobrin, nativo de Jerusalén, pero con una amplia experiencia en gestión de hoteles de lujo en varios países del mundo.
Ostentador de objetos históricos
En un lugar donde el lujo es religión, como es el caso del Hotel Rey David, los elementos costos o únicos suelen encontrar un lugar. Es el caso de la mesa que hay en el Salón de Lectura del establecimiento, que es la misma en la cual el Primer Ministro Isaac Rabin firmó el tratado de paz israelí-jordano en 1994.