La Ciudad Vieja de Jerusalén sigue progresando en términos de accesibilidad. En las últimas semanas se han adaptado cuatro kilómetros de calles en el barrio musulmán, armenio y cristiano, y se han instalado dos kilómetros de pasamanos junto a varias escaleras de la zona. Asimismo, algunos de los puntos turísticos se han equipado con aplicaciones de audio para invidentes.
Las adaptaciones para las personas con movilidad reducida han consistido en reparar y renovar los servicios públicos, señalar los principales puntos de interés, actualizar el sistema actual de limpieza, reemplazar el revestimiento de piedra y renovar los complejos comerciales y fachadas.
Para facilitar la accesibilidad a personas con discapacidad visual, el Centro para Ciegos de Israel ha puesto en marcha una aplicación con recorridos de audio explicativos de la Ciudad Vieja de Jerusalén.
Por su parte, el Museo de la Torre de David también ofrece itinerarios especiales para invidentes y, además, ha adaptado su gran espectáculo. Una descripción de audio (en hebreo e inglés) narra con detalle cada una de las escenas que muestran un episodio de la historia de Israel.
FOTO: Una de las calles de la Ciudad Vieja, adaptada con una rampa accesible para sillas de ruedas/Ben Hakon