Una extraña lámpara de aceite, con forma de cara extravagante cortada por la mitad, ha sido hallada por los arqueólogos de la Autoridad de Antigüedades de Israel bajo los cimientos de un edificio construido sobre el camino de peregrinación del parque nacional de la Ciudad de David.
Los arqueólogos Ari Levy y el Dr. Yuval Baruch consideran que la lámpara de aceite, depositada intencionadamente bajo los cimientos de un edificio datado de la época romana, buscaba atraer la buena fortuna a los residentes que lo habitaban. “La ofrenda de esta lámpara podría confirmar la importancia de la vivienda, pudiendo haber estado vinculada a la protección del Estanque de Siloé, la principal fuente de agua de la ciudad”.
El artefacto, que en realidad es media lámpara, sería un hallazgo único en Israel por su extraño aspecto. Vertida sobre un molde esculpido, su forma recuerda a media cara de un hombre barbudo de apariencia grotesca. La punta tiene la forma de una luna creciente y el asa, el diseño de una planta de acanto. La decoración que aparece en la lámpara recuerda a los motivos artísticos típicos romanos, similares a las máscaras teatrales.